viernes, 9 de febrero de 2007

Sin camino, sin hogar, sin rumbo

Te he visto esta mañana. Tu mirada perdida cargada de soledad y tristeza se posaba en la otra acera. Y esa mirada, aunque no fuera dirigida a mí, me paralizó. Caminando poco a poco, temiendo que con cada paso tus pies se hundieran contigo detrás; así te perdí. La marea me arrastró, alejándome, pero aunque mis ojos te perdieran de vista en el semáforo, todavía lates en mi mano <<pom pom>>
<<pom pom>>