jueves, 6 de julio de 2006

Los peores momentos de mi vida/4

...
Mi padre, frenético, pide a gritos mi ayuda, aunque no se explica bien... salgo y el pánico me devora. Thor se desangra a borbotones, no para, se lame pero la sangre no se contiene. El pavor inunda mi cuerpo y no me deja pensar con claridad. SANGRE. Esta idea se expande en mi mente, no reacciono, sólo gimo.
Mi padre se pone nervioso y corre a llamar al veterinario. Sola, Thor, Sangre. Ganas de vomitar, calor en la nuca, mareos... Tapar, tapar, tapar, tengo que tapar esa herida, REACCIONA!
Papel de cocina, enrollo su pata, no es suficiente, se tiñe de rojo. Los nervios me fallan, DESESPERACIÓN. Más papel. Llamada terminada. Coche y al veterinario. Mientras las calles pasan lentamente por mi lado, Thor, aunque enfrente de mí, se aleja. Presiono la toalla que envuelve su corte para intentar para la hemorragia, y en vano noto en mis manos una humedad caliente.
Minutos interminables de espera... media hora después Thor reaparece en brazos de un padre preocupado pero seguro.